Por SACHAMA
(…) Llegamos al mes de
Diciembre, como escueleros ya comenzábamos a temblar, porque se acercaban los
exámenes y, si no aprobábamos el año, nos esperaba una señora maja, que nos dejaba como decían: "Pa caldo"; de todas maneras pasaban
los exámenes y cualquiera que haya sido el resultado, los cumpas
nos reuníamos en la plaza, para planificar cual va a ser nuestra vida durante
los tres meses de vacaciones; el autor es éstas líneas, no gozaban de las
vacaciones, porque yo las pasaba con mi recordado abuelo Manuel Sánchez Sánchez
en su fundo de "Tondorcocha";
mis queridos amigos en esas faldas, laderas y filas de los cerros mi ser
retozaba como potrillo engreído, como un quende
que detiene su vuelo para chupar el néctar de las flores, como un viento que silva, como la chinalinda que con su precioso vuelo invita a su congénere a seguirla,
con las gargachias que con su
acolumpiadoo vuelo nos hace meditar, en fin, gocé con la Naturaleza y lo más
grande es que saboreé el afecto más puro de un hombre que me enseñó a ser
hombre.
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Pastoritas de Calconga
En Lima
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Este mes de Diciembre
también se recuerda y hasta la actualidad, se lo considera como uno de los más
bonitos, porque el mundo cristiano recuerda el nacimiento de JESÚS, quien por
haber nacido en un humilde pesebre, nos dio la mejor lección de modestia y de
amor a toda la humanidad. En el Huauco, desde los primeros días, la familia
Silva del barrio de Minopampa, ña Jobita,
las Zegarras de la Toma y Chaupihuasi respectivamente, ensayaban a
las pastoritas, las que con sus
cantos de bellos villancicos y los pícaros "Ingos" con su bailar quimbero
y el dicho de sus brindis, hacían el deleite de los creyentes. Faltando ocho
días, para el 25 de Diciembre, las encargadas de la Iglesia, avisaban a loa Huauqueños entusiastas, para que vayan a
traer; shapras, cauchas, loros y
monte, para confeccionar el pesebre; construido éste en el centro de la
Iglesia, las pastoras listas con sus bailes y cantos, el día 24 de Diciembre; a
las 3 p.m. llegaban una y otra tropa de pastoras, después de cantar y bailar
"suda-suda", se retiraba
hasta la noche, donde regresaban, para cantar y bailar hasta el nacimiento del
Niño Dios, en ese momento le entregaban sus regalos después de saludarlo a través
de un brindis. La tropa que sobresalía siempre, era la de las Silva de Minopampa; recuerdo mucho a las capitanas Rosabel
Escalante y Beldad Chávez, daban un colorido a ésta tradición, digna de la
mejor pluma, porque conque ganas bailaban y el salero y belleza física y
espiritual contagiaba a todos.
Después El Shirmico Riquelme, lamiéndolo sus
jetas y con pañuelo a la nuca bailaba como trompo y el momento de dar su
brindis el cholo, al propósito se equivocaba, para repetirlo y así congraciarse
más con la audiencia. Amanecía el día 26 de diciembre. La mayoría de los
allegados a las familias de las tropas de las pastoras han vandeado la noche y los que no habíamos estado en esos menesteres
por nuestra edad y porque no éramos de su entorno, solamente nos quedaba el
comentario de cuál de las tropas ha estado mejor. Después de dos días de
holgorio, a muchas personas les hacían inocentes, en recuerdo a lo que hizo
Herodes allá en la Tierra de JESÚS hace 2000 años. (…)
(…) El día 6 de Enero
gustábamos del canto inocente de las pastoras, las que, reunidas en tropas, a
través de sus contrapuntos, se hacían del aprecio especial de cada Huauqueño;
esto a la niñez lo conducía al mundo de las hadas y los mozos y mozas, que con
sus guiños pícaros, comenzaban ardientes amoríos o se citaban para festejar a
Eros. (…)
Del libro Huauco, Págs. 47, 63-65.
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